Cuando los colapsos del sistema eléctrico nacional y de suministro de agua estallan y las excusas de que la culpa es de la IV República, del fenómeno del Niño, de los ricos que le roban el agua a los pobres y de los Centros Comerciales con su derroche energético ya no se las cree nadie, y la vela y la totuma pasaron a formar parte del repertorio nacional de chistes (como aquella cuña de Chávez hablando del amoooor, ¿se acuerdan?) entonces surge, como el conejo de la chistera del mago, la amenaza de guerra contra Colombia, que por cierto, lejos de unir a los venezolanos en un frente patriótico común (como era la intención del Gobierno) le ganó un profundo rechazo (80% según algunas encuestas), saliéndole el tiro por la culata a las pretensiones bélico-energúmenas del führer tropical venido a menos.
Hoy, cuando la punta del iceberg del sistema mil millonario de corrupción chavista sale a flote con la detención del Rey de Mercal (a quién Chávez tuvo el tupé de desconocer públicamente), la huida de Torres Ciliberto (Seguros La Previsora y dueño de bancos), la aprehensión de tres directivos de PDVsa, con las consecuentes guerras entre poderosos grupos económicos boliburgueses del entorno presidencial, entonces, cuando la imagen del socialismo endógeno del siglo XXI, del gobierno de participación para los pobres se descubre como una olla podrida que deja pálidas a las corruptelas de los 40 años adeco-copeyanos, entonces… CHAVEZ DECLARA GUERRA A LA DELINCUENCIA. Leer Panorama del domingo
En un solo acto, patrulleros del Psuv y aspirantes a integrar la Policía Nacional, escucharon al presidente Chávez declararle la guerra a la delincuencia.
“Así como dije que hay que prepararse para la guerra si queremos paz, pues hay que prepararse para defender al pueblo del hampa”, fueron las sorpresivas palabras del Mandatario nacional es la primera vez que con tal contundencia se le escucha arremeter contra la que según todas las encuestas es la principal angustia de los venezolanos: la inseguridad.
“Este es un tema de los que más preocupa al país hoy y hay razones para que sea así, porque se ha ido convirtiendo en un flagelo”, dijo el Jefe del Estado quien nombró como director general de la Policía Nacional a Luis Fernández Delgado.
(…) “Vamos a derrotar el crimen y el hampa y darle seguridad a nuestros ciudadanos”, añadió Chávez.
“Este Gobierno tiene que apretar las manos (…). Tenemos que organizarnos mucho mejor para derrotar el crimen, el hampa y la delincuencia, para prevenirla y cuando haga falta, usar la violencia en el marco de la ley”, sostuvo.
Después de once años de gobierno (mas de dos períodos presidenciales de los antiguos) y (calculan) 160.000 muertos en actos de una escalada de violencia indetenible, con cuerpos policiales al servicio no de la comunidad sino del régimen, con efectivos policiales directamente involucrados con el sicariato y las bandas armadas, ahora sí hay que declararle la guerra al hampa… que si uno supiera que es en serio, pero este gobierno nos tiene tan acostumbrados a sus trapos rojos y potes de humo, que ya nos imaginamos que es pura retórica mediática, junto a la eliminación del seguro HCM para los empleados públicos, para que la atención se fije en el polo opuesto de la cabalgante, boyante corrupción boliburguesa del siglo XXI y sus conspicuos 40 ladrones, que vienen a ser la insignia de este socialismo de pacotilla.
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Alzando la voz
Educación popular católica
Rafael Díaz Blanco
Hace unos años llegó al Zulia como tercer obispo de Maracaibo un magnifico pastor. Más tarde sería el primer arzobispo de la ciudad y ya jubilado continuaría sirviendo a la Iglesia y a su pueblo como administrador apostólico de la entonces recién creada Diócesis de El Vigía y más tarde como vicario general de la Diócesis de Maracaibo hasta su muerte, el 1 de enero de 2000. Nos referimos a Monseñor Domingo Roa Pérez cuya fecunda obra dejó huella profunda entre nosotros. Hace 40 años fundó las escuelas de la Arquidiócesis que hoy son 29, tienen 20.368 alumnos y 1.586 trabajadores.
Las escuelas de la Arquidiócesis fueron fruto de la preocupación permanente de Monseñor Domingo Roa Pérez por una educación popular católica a tono con las recomendaciones de Pio XII a los venezolanos en ocasión de los 300 años de la Virgen de Coromoto, con los documentos del Concilio Vaticano II y las enseñanzas de la Iglesia en materia educativa y sobre todo con el mandato de Puebla.
Fue tal la importancia que el insigne prelado le dio a este compromiso de la Iglesia con los más pobres que se llegó a decir que Roa Pérez prefería cerrar una iglesia antes que una escuela.
Hoy, las escuelas de la Arquidiócesis confrontan una crítica situación económica, agravada por la reducción de las asignaciones contenidas en el presupuesto del Estado. No entendemos como el Zulia puede seguir ganando, según reza la insistente y multimillonaria propaganda de la Gobernación y estemos perdiendo nuestras escuelas.
Los zulianos, y especialmente nuestros parlamentarios y gobernantes, estamos obligados a defender nuestras escuelas católicas. Si lo hacemos, seremos consecuentes con nuestra lucha por la libertad y la democracia, con nuestra oposición a una ley de Educación que entre otras pretende confinar la educación religiosa al ámbito familiar, con nuestro rechazo a los permanentes ataques, atropellos y acosos que sufre la Iglesia por parte de un régimen político que sólo ve en ella un formidable adversario de un proyecto político totalitario. Aprovechando las dificultades del presente para el fortalecimiento de la educación popular católica, a 10 años de su muerte, le haremos un magnifico homenaje a su creador que tanto dio al Zulia, que tanto nos enseñó.
Publicado en el Diario La Verdad de Maracaibo el 17 de diciembre de 2009
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