Tomado de Noticiero Digital http://www.noticierodigital.com/forum/viewtopic.php?t=450802 (Sab Nov 01, 2008)
Editorial
El Nacional
La ventaja de Rosales
El Zulia en la mira
Así será de grande la ventaja que le lleva la oposición en el Zulia a los candidatos del oficialismo, que a Chávez no le ha quedado más remedio que instalarse allá para tratar que la derrota del 23-N no sea tan vergonzosa. Por ello, el Presidente desembarcó en las costas del lago de Maracaibo con el espíritu bravucón de un conquistador español del siglo XVI, pateando duro, dando gritos y reclamando como suyo algo que ni de lejos le pertenece.
Tratar de humillar y atemorizar a los zulianos desde Miraflores es uno de los más grandes errores de esta campaña electoral en la que, descaradamente, el Presidente de la República interviene no como partidario sino como el jefe del comando electoral del PSUV. Se trata, por desgracia, (para los aspirantes a alcaldes y a gobernadores) del mayor insulto que al liderazgo y capacidad de arrastre popular de los candidatos oficialistas les inflige Chávez, quien debería más bien impulsar, si estuviera más cuerdo, el fortalecimiento de sus líderes populares.
Ahora la contienda electoral ya no se divide entre candidatos del socialismo del siglo XXI y candidatos de la oposición. Hoy la elección debe hacerse entre aquellos competidores democráticos que juegan limpio, y aquellos que corren en la contienda con una inyección de esteroides que les pone Chávez, para ver si alcanzan a los campeones. Si estos oficialistas hubieran competido en las olimpíadas de China ya estarían descalificados por dopaje.
Pero en el Zulia la cuestión alcanza dimensiones muy especiales: allí el oficialismo ha sido derrotado innumerables veces porque los zulianos no se han dejado poner la bota militar en la cara. El Presidente mandó para allá a sus generales más serviles, les ha dado multimillonarios recursos para que compren conciencias y monten operaciones sucias contra Rosales y sus colaboradores, pero nada de eso funcionó, y no les va a funcionar. El pueblo zuliano no está en oferta, y mucho menos para un llanero advenedizo que, a lo mejor, en enero traslada y asienta a su familia en Maracaibo y la enriquece mucho más con los negocios del petróleo, malignamente manejados por Maletín Ramírez, el hombre de confianza del clan Kirchner en Pdvsa.
El candidato Manuel Rosales no ha insultado a su contendiente, ni se ha metido con el Presidente, más bien le dijo: "Bienvenido Chávez al estado Zulia". Lo hizo pese a que él, como Presidente "está incumpliendo con la ley al hacer campaña electoral" a favor de los candidatos del PSUV. En verdad, dijo Rosales, "no nos interesa su terrorismo verbal, o su persecución política ni su campaña de guerra sucia".
El candidato opositor le recordó al llanero barinés que "hagan lo que hagan y digan lo que digan, el voto del Zulia será digno y democrático", y no comprado o inyectado con esteroides. Con esa gracia y picardía zuliana, le recordó a Chávez que su candidatura goza de "una pequeña ventaja" de apenas 45 puntos por encima de la de su adversario del PSUV, Henry Ramírez. Nada menos.
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